El vino no solo acompaña la comida… la transforma. Y en el caso del Moscatel, estamos ante un alquimista en copa.
🍽️ 1. Foie de pato con escamas de sal y pan rústico
Empezamos fuerte. El foie y el Moscatel nacieron para encontrarse. Su untuosidad necesita un contrapunto fresco, dulce y aromático… y ahí el Moscatel entra como un abrazo. Añade un poco de sal marina y pan de masa madre crujiente y tienes una entrada digna de estrella Michelin.
Bonus del enólogo: elige un Moscatel con algo de crianza oxidativa. El contraste será sublime.
Moscatel recomendado: Moscatel de Pasas “Los Madroñales”
Por qué maridarlo con este moscatel:
Elaborado con uvas asoleadas, su concentración de azúcares naturales, notas de higos y fruta escarchada lo hacen perfecto para realzar la untuosidad del foie y contrastar con la sal en escamas. Una combinación que roza la experiencia sensorial de alta cocina.
🍣 2. Sushi de salmón, anguila o atún rojo
Sí, sushi. Y sí, Moscatel. Lo sé: suena a locura, pero es química pura. El arroz avinagrado encuentra balance con el dulzor, y los pescados grasos se elevan con los toques cítricos y florales del vino.
Mi consejo: sírvelo bien frío y no lo anuncies. Deja que se sorprendan con el primer bocado.
Moscatel recomendado: Moscatel Especial Dorado “Los Madroñales”
Por qué maridarlo con este moscatel:
Sus notas cítricas, su paso más ligero por boca y su perfil aromático hacen que armonice con el arroz avinagrado y los pescados grasos, sin invadir ni enmascarar sabores. Un equilibrio sutil y sorprendente.
Moscatel recomendado: Moscatel Especial Oscuro “Los Madroñales”
Por qué maridarlo con este moscatel:
Este vino posee una intensidad aromática con matices de turrón, pasas, miel y caramelo. Ideal para confrontar —y suavizar— la potencia salina y el amargor natural de los quesos azules más intensos.

🧀 3. Quesos azules (y cuanto más potentes, mejor)
Roquefort, Gorgonzola, Cabrales… esos monstruos salinos y cremosos que espantan a los débiles de paladar. Pues con Moscatel se convierten en pura poesía. El vino los envuelve, los calma y los lleva a una dimensión golosa pero elegante.
¿Un truco gourmet? Una nuez caramelizada encima. Y a volar.
Moscatel recomendado: Moscatel Especial Oscuro “Los Madroñales”
Por qué maridarlo con este moscatel:
Este vino posee una intensidad aromática con matices de turrón, pasas, miel y caramelo. Ideal para confrontar —y suavizar— la potencia salina y el amargor natural de los quesos azules más intensos.

🍛 4. Curry suave de pollo o verduras
El curry tiene su propio mundo de aromas: cúrcuma, comino, cilantro… todo muy fragante. Y el Moscatel lo abraza sin competir. Es como si la cocina india y la viña gaditana se hubiesen dado la mano en secreto.
Ojo: no abuses del picante. Aquí buscamos armonía, no combate.
Moscatel recomendado: Moscatel Selecto “Los Madroñales”
Por qué maridarlo con este moscatel:
Tiene una estructura media, buen equilibrio entre dulzor y acidez, y un perfil floral que encaja muy bien con especias suaves. No abruma el curry y acompaña su complejidad aromática sin competir.

🌮 5. Tacos de cochinita pibil o cerdo a la barbacoa
Uno de mis maridajes favoritos. El dulzor del Moscatel se mezcla con la acidez de la naranja agria, el ahumado de la carne y la chispa del chile. Es un maridaje atrevido, moderno… y adictivo.
Pro tip: sirve en formato mini-taco. Perfecto para una cata informal.
Moscatel recomendado: Moscatel Especial Oscuro “Los Madroñales”
Por qué maridarlo con este moscatel:
La acidez y dulzor se equilibran con los sabores ahumados y cítricos de la cochinita. Las notas de fruta madura, pasas y caramelo del vino potencian el sabor del cerdo marinado.

🍓 6. Ensalada de frutas con albahaca y ralladura de lima
Ligera, herbal, fresca. El Moscatel se siente como en casa. Potencia la fruta, acaricia la acidez de la lima y se funde con los aceites esenciales de la albahaca. Ideal como entrada o como postre alternativo.
Moscatel recomendado: Frizzante Noa Noa 75cl
Por qué maridarlo con este moscatel:
Su burbuja fina, ligereza y perfil frutal complementan a la perfección la frescura de frutas y hierbas. Aporta alegría, limpia el paladar y deja un retrogusto refrescante.
🍕 7. Pizza de pera, nueces y gorgonzola
La combinación más millennial de la lista. Y también una de las más efectivas. La pizza se convierte en un plato gourmet si la acompañas con la copa adecuada. Aquí, el Moscatel actúa como el pegamento que une todos los sabores.
¿Un consejo? Añade un hilo de miel sobre la pizza justo antes de servir.
Moscatel recomendado: Moscatel Especial Dorado “Los Madroñales”
Por qué maridarlo con este moscatel:
El dulzor moderado equilibra tanto la cremosidad salina del gorgonzola como el dulzor natural de la pera. Su estructura media le permite integrarse con todos los ingredientes.

🍤 8. Tempura de langostinos o verdura
Crujiente, delicado, sabroso. La tempura necesita un vino que no la opaque… y el Moscatel sabe ponerse al servicio del plato. El contraste de texturas y temperaturas es un lujo sencillo.
Lo ideal: servir en porciones pequeñas durante una cata o cóctel.
Moscatel recomendado: Frizzante Noa Noa 75cl
Por qué maridarlo con este moscatel:
Las burbujas del Noa Noa limpian el paladar tras la fritura, y sus notas afrutadas realzan la suavidad del langostino o la verdura sin ocultarla. Una opción ligera, ideal para abrir boca.
🐖 9. Jamón ibérico de bellota
Este es un clásico que sorprende a quienes nunca lo han probado juntos. El Moscatel subraya el sabor profundo del jamón, lo suaviza y lo convierte casi en caramelo salado. Brutal.
Consejo del experto: corta el jamón fino y sirve el Moscatel muy frío. Agradecerás el contraste.
Moscatel recomendado: Moscatel Especial Oscuro “Los Madroñales”
Por qué maridarlo con este moscatel:
Un clásico gaditano: la potencia del jamón ibérico marida con el dulzor y los toques de frutos secos y caramelo del vino. Juntos generan una experiencia profunda, equilibrada y sorprendente.
🍫 10. Brownie con toque picante (chile o pimienta rosa)
El gran final. Porque sí, también puede acompañar postres… pero no cualquiera. Busca uno con un punto especiado o picante. El Moscatel lo envuelve y lo transforma en un final de fiesta perfecto.
Extra: añade una pizca de sal gruesa al brownie antes de hornear.
Moscatel recomendado: Moscatel de Pasas “Los Madroñales”
Por qué maridarlo con este moscatel:
La concentración aromática del moscatel de pasas, con sus notas a higo, dátil y miel, se funde con el chocolate oscuro y equilibra perfectamente un toque picante. Cierra la experiencia con elegancia y fuerza.